MENSION ESPECIAL A LA DISTINGUIDA POETISA MEXICANA MARIA DE LOURDES HERNANDEZ FUENTES EN IMAGEN, MELODIA Y POESIA

**MI AMOR QUEDO MARCADO POR TI**

Mi amor quedó marcado por ti
esa noche en la que nos entregamos
fueron preludios de amor y placer, así
la noche transcurrió y el amanecer surgió sintiéndonos enamorados.

Amarnos fue lo más hermoso que nos pasó
nada cambiaría por esa noche de entrega y pasión
dulces recuerdos guardo en mi corazón de lo que ocurrió
pero poco a poco te alejaste de mi, dejándome sin ilusión.

Mi amor quedó marcado por ti…aun guardo tus besos
aun guardo ese olor tuyo, pues se ha impregnado en mi piel
he dejado las manecillas del reloj en la hora de nuestros hechos
en completa soledad esta mi alcoba y lo que dejaste en el dintel.

Esa cajita musical que me regalaste con nuestra melodía
y al oírla recordaríamos nuestro querer
sin olvidarnos de este gran día
que sin duda sería en cada anochecer.

Cantos de amor nos dijimos embriagados de placer
promesas de amor nos juramos enamorados
¡Oh! amado mío quisiera retroceder
no deseo recordar mi triste historia de un amor olvidado.

Autor: **Lulù Hdz.**
Monterrey, N.L.
Mèxico

MENCION HONORIFICA A LA DISTINGUIDA POETISA: MARIA DE LOURDES HERNANDEZ FUENTES EN EL CONCURSO CARTAS EN EL DIA DEL PADRE

CARTA A MI AMADO PADRE

Aun recuerdo claramente cuando me dijeron: “Tú papá está en el hospital, es necesario que vayas”. No me pude contener y un llanto desgarrador brotó de mi garganta.

¡No, mí papá no se puede morir! Pero al llegar al hospital, una sábana cubría su ya frío cuerpo. Yo le tomaba la mano para darle calor y así reanimarle, pero no, todo fue en vano, mi padre, sí mi padre… había muerto.

Un derrame cerebral acompañado de un infarto fue lo que acabó con su vida.

Yo me abrazaba a su cuerpo inerte y le decía: “¡Papito de mi vida, háblame, despierta, mira aquí estoy yo, despierta por favor, tú no puedes estar muerto, eres mi papito adorado y los papás son muy valientes no se mueren y dejan a sus hijos!”.

Pero todo fue en vano, ni mis gritos ni mi llanto desesperado lo despertaron… ya jamás. Mi padre no volverá a abrir sus ojitos, porque él… ya está muerto.

Han pasado los años y aun te recuerdo, claramente escucho tu voz y tal vez con el mismo soplar del viento, siento que me abrazas, dándome calor y palmaditas en mi espalda, como dándome ánimos y aliento.

Gracias padre por el cariño y el amor que me diste, nunca mientras yo viva te olvidaré, y siempre te llevaré en mi pecho junto a mi corazón.

Con cariño tu hija Titty.

Autor: **Lulù Hdz**

Monterrey, N.L.

Mèxico